El curioso caso se dio en la ciudad de Lambaré. Doña Jacinta Gutiérrez nos explica que lo hizo en primer lugar porque el mejor alimento que existe para un hijo es la leche materna y además para obtener el récord mundial de amamantamiento. Cuestionados sobre que tan correcta o bizarra es tal conducta nos explica:
"En mi familia esto no tiene nada de raro. Nosotros somos colorados fanáticos de seccional, mi marido fue nombrado en Itaipú por 20 años ininterrumpidos de hurras. Digamos que no conocemos otra vida que chupar del tití del estado, chupar tití es nuestra identidad. Así que conviene que Juancito se acostumbre no más".
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